El expresidente cuestionó fuertemente las políticas del mandatario ultraderechista, y lamentó que “el hambre ha vuelto a Brasil de una forma violenta”.
Durante la presentación de una plataforma de propuestas en oposición al Gobierno de Jair Bolsonaro, el expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, pidió recuperar la capacidad de indignación para derrotar al actual mandatario.
En el Sindicato de Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo, en el Gran San Pablo, el exmandatario presentó el “Plan para la Reconstrucción y Transformación de Brasil” confeccionado por la Fundación Perseu Abramo, del Partido de los Trabajadores (PT).
“El hambre ha vuelto a Brasil de una forma violenta”, lamentó Lula, quien apuntó principalmente al retiro del Estado de la economía a partir de la destitución de la presidenta Dilma Rousseff en 2016 y la llegada de una nueva política de la mano de sus sucesores, Michel Temer y Bolsonaro.
Lula Da Silva presentó el “Plan para la Reconstrucción y Transformación de Brasil”.
Además, Lula da Silva se quejó de que organizaciones sociales y sindicales no tuvieron “poder de reacción” ante las medidas de Bolsonaro. “No reaccionamos a tiempo a las políticas de destrucción de los derechos de los trabajadores que había conquistado el pueblo pobre de este país, ellos lograron sacar derechos destruyendo todo lo construido”, remarcó.
Lula apuntó a la reforma laboral de 2017 que flexibilizó la normativa instalada en la década de 1930 y a la reforma jubilatoria que hizo el presidente ultraderechista en 2019, y además enumeró una serie de críticas a Jair Bolsonaro, a quien calificó de “Nerón prendiendo fuego a Roma” intentando beneficiar al agronegocio con la deforestación amazónica.
Por otra parte, el expresidente cuestionó la desigualdad creciente y el cese de una política de aumentos de salarios y convocó a “indignarse” con el regreso del hambre y de los niños pidiendo limosna en las calles de ciudades grandes como San Pablo.
“Es humanamente imposible imaginar que perdimos el derecho a indignarnos con tan pocos ganando mucho y tantos ganando tan poco, algo que un tema mundial”, afirmó Da Silva, y sostuvo que cuando el estado se retira de la economía “no existe más nada” para la población.
Por último, Lula rechazó la política de Estados Unidos en los asuntos venezolanos y repudió la visita del secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, a Brasil el pasado viernes, ocasión en la que acusó de narcotraficante al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
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